domingo, 29 de mayo de 2011

El gran paso de Zaira Nara.

La modelo  se prepara para su casamiento con el futbolista, Diego Forlán

Zaira Nara y Diego Forlán ya cuentan los días que restan para su boda de ensueño. El día fijado para la ceremonia civil es el 30 de julio. Una ceremonia íntima solo para la familia. El casamiento por iglesia, en pleno verano, culminará con una mega fiesta a la que asistirán 500 invitados de la farándula y el deporte. Los jugadores del Atlético Madrid viajarán desde España para estar junto a su amigo.
"Estoy tan sensible que todo lo relacionado con la boda me emociona muchísimo -confiesa-. Tanto que cuando me cruzo novias me pongo a llorar. Sé que voy a llorar mucho el día de mi casamiento. ¡Espero que el maquillaje sea a prueba de agua!. Mi papá siempre me dice: `No hagás como tu hermana Wanda que entró corriendo a la iglesia´. Quiero que mis pasos duren para siempre. Para mí, lo más importante es encontrar la iglesia de mis sueños".
Zaira admite que está sorprendida. Siempre pensó en casarse joven, pero no a los 22 años. Incluso, sostenía que ese día estaba lejos porque antes que nada era una mujer independiente. Hasta que llegó Diego a su vida. El amor la hizo entender que no tenía porque ir por el mundo con una coraza. No tenía sentido si estar con un hombre era lo que la hacía feliz.
Mientras llega el Día D, Zaira viajó a la ciudad de Carmelo, en Uruguay, para continuar con los preparativos de la boda. Diego, de origen uruguayo, es el futbolista estrella del Atlético de Madrid y fue elegido el mejor jugador del mundo en el último Mundial Sudáfrica 2010. Pero además, es un romántico con todas las de la ley.
Jamás olvidará el día en que le pidió casamiento. Después de tres años de convivencia, el 5 de marzo Diego le propuso matrimonio. Fue durante la noche, después de una victoria del club español en la que su aporte, una vez más, fue fundamental. La respuesta de Zaira fue llorar sin parar durante cinco minutos. Solo después que se repuso le pudo dar el sí.

DERRETIRSE DE AMOR
"Fue 'el momento' y fue increíble -exclama Zaira-. Después pensás en cómo será la fiesta, pero nada supera la sensación de ese instante. Creo que Diego pensó mucho en cómo sorprenderme. Como los dos somos vergonzosos, sabía que yo no iba a poder contestarle de inmediato. Tuvo en cuenta cuál sería mi reacción y por eso eligió hacerlo en un hotel. Me derretí de amor cuando me preguntó si quería casarme con él. Entonces le dije que sí, que moría por hacerlo".
El poeta y músico brasileño Vinicius de Moraes dice que "lo que el corazón une, el tiempo y la distancia no pueden separar". Y eso es exactamente lo que les pasó a Zaira y Diego. El jugaba en España, ella modelaba en Argentina. Se veían cuando podían y cada vez era más difícil separarse. Hasta que Zaira comprendió que estaba enamorada y que Diego era el hombre de su vida. Lo asumió y tomó una decisión.
"Siempre fui dejando cosas por él -admite-. Y nunca antes lo había hecho por nadie. Dejé trabajos importantes. Este último verano fue decisivo porque la convivencia fue mucho más intensa. No hice 'La cocina del show' para estar con Diego en España. Entonces comprendí que mi felicidad no pasaba ya por el mismo lugar. Ya no quería volver sino quedarme junto al hombre que necesitaba cerca todos los días. Y a él le pasaba lo mismo".
Conclusión: ya están rumbo al altar, con Zaira encargándose de todo junto a Bárbara Diez la top "wedding planner". La madrina será su hermana Wanda y sus mejores amigas las 8 damas de honor. La prioridad, en este momento, es encontrar el salón adecuado para después de la ceremonia religiosa. Zaira lo está buscando en Buenos Aires, Montevideo, Punta del Este y Carmelo. Lo otro, lo que la desvela, es encontrar la iglesia de sus sueños. Sueña con el momento en que entra, vestida de blanco, del brazo de su padre.
El vestido, que lo eligió entre 900, se está confeccionando en Barcelona y la diseñadora es la top Rosa Clara; si bien es cierto que Zaira, de chiquita, ya tenía en la cabeza el vestido que iba a usar el día de su boda. La luna de miel es un secreto, ya que el encargado de elegir el lugar es Diego. La novia no duda que será uno de los Paraísos Terrenales que hay junto al mar. El problema es que, por razones laborales, será una luna de miel corta. A lo sumo, tres días.

No hay comentarios:

Publicar un comentario